
Una de las prendas que no debe faltar cuando practicas ciclismo es el culotte de ciclismo personalizado o no personalizado. Sin embargo, al acabar la actividad, es importante que lo dobles y guardes de la forma correcta.
Gracias a esto, mantienes un espacio más ordenado, y te aseguras de no dañar la tela del culotte, permitiendo que dure en las mejores condiciones por más tiempo.
Doblar el culotte de forma sencilla
Lo primero que debes hacer es colocar el culotte boca abajo y dejar la badana doblada al medio. Luego vuelve a doblar sobre el eje vertical, para evitar que aparezcan arrugas en la badana.
Toma las perneras que quedaron superpuestas y dóblalas juntas, como si las fueras a enrollar alrededor de la badana.
Siguiendo estos pasos sencillos, el culotte quedará en forma compactada, permitiendo que su almacenamiento sea más sencillo. El culotte se puede doblar con la badana plana y en la posición inicial, o bien doblar la badana a la mitad, como vimos en este caso.
Sin embargo, no hay problema que dobles a la mitad la badana si vas a usar el culotte en los próximos días. El inconveniente con esta técnica surge cuando vas a pasar muchos días sin usarlo.
En este caso, lo ideal es doblar la badana en su posición original, porque si la doblas a la mitad, puede llegar a deformarse y generar incomodidad, o producir rozaduras en la piel.
¿Dónde guardar el culotte?
Para conservar en mejor estado el culotte de ciclismo, evita guardarlo en sitios húmedos o en contacto directo con el sol, las temperaturas extremas terminarán por dañar el culotte, perdiendo todas sus características.
El método anterior descrito funciona muy bien para guardar el culotte de manera práctica y sencilla en los cajones de los armarios, incluso ocupa poco espacio, permitiendo que coloques otros culottes, o bien, otra ropa de ciclismo que uses.
Si tienes un armario grande, una buena opción es colgar los culottes, así como el resto de las prendas dentro de una percha. Esto facilita el acceso a las prendas, y se evita doblarlas y tenerlas en esa misma posición por mucho tiempo.
¿Cómo lavar el culotte?
Antes de doblar y guardar el culotte en el armario, debes aprender a lavarlo de la forma correcta, eliminando el sudor y la suciedad, para que se mantenga en óptimas condiciones.
El proceso de lavado no es complicado, pero el uso de tecnología y de tejidos especiales en el culotte, requiere que se traten de la manera correcta para no dañarlos.
Hay zonas en la prenda donde el tejido es complejo, esto por su composición diseñada para que se mantenga firme y no estirada, incluso hay partes antibacterianas que conforman la estructura del culotte.
Aunque los mismos fabricantes venden detergentes específicos para esta prenda, cualquier opción del mercado puede servir para lavar el culotte. Lo importante es la forma de lavar la prenda.
Hay varios puntos importantes a tener en cuenta para que el lavado de la prenda sea el más eficiente, entre las cuales se encuentran las siguientes.
Lavar después de usar
No es recomendado que el culotte y otras prendas de ciclismo pasen mucho tiempo guardadas en la ropa sucia. Al quedar los tejidos húmedos y con aroma, se potencia el cultivo de bacterias, y los materiales de alto rendimiento se terminan dañando por mantener el sudor durante largos períodos de tiempo.
Lo esencial es lavar inmediatamente después de practicar ciclismo, de esta manera te olvidas de los malos olores, las bacterias, y los daños en la prenda.
Uso de la lavadora
El culotte también se puede lavar en la lavadora sin problemas, lo importante es que cuente con un ciclo de lavado delicado o programas para ropa de alto rendimiento. En cualquier caso, se recomienda comprar una malla de lavandería para cuidar mejor del culotte durante el lavado.
La agitación de la lavadora no afectará la durabilidad del culotte o ropa de ciclismo, sin embargo, no se debe detener el ciclo de lavado, de lo contrario las partículas de suciedad se quedarán en los tejidos, causando más daños.
Uso adecuado de detergentes
Aunque los detergentes se pueden usar para lavar el culotte, no es necesario colocar una gran cantidad de detergente cuando se lave, esto provocará un descolorido del tejido, dañando así su estética.
Si se usan detergentes líquidos, se debe verter una cantidad menor a la indicada en el producto, dado que su concentración es mayor.
Tampoco se necesita usar suavizante o cloro para quitar el mal olor del culotte o para dejar la tela más suave. Ambos productos pueden dañar el tejido de alto rendimiento o la elastina, incluso se estirará con el paso del tiempo.
Evitar la secadora
A la hora de secar el culotte, no se debe utilizar la secadora. Las fibras se pueden dañar por la secadora, reduciendo la vida útil de la prenda. El agua caliente es capaz de dañar las fibras del tejido, por lo que usar una secadora, que es como un horno, causa daños más graves.